Miércoles, 30 Agosto 2017 09:29
Ciento Cincuenta y Cuatro Veces: Pereira
Describir la ciudad de hoy, es recordar el pueblo de ayer.
Aquella aldea que un día CAÑARTE mirara con visión profética, de que en un futuro sería algo más que un asentamiento, llega a convertirse en una capital.
Aquí, las semillas que se sembraron con el abono de románticas esperanzas de ver una PUJANZA de la que habla su himno, se ha convertido en un hito del Tradicional Paisaje Cultural Cafetero.
Este amor de antaño que vivieron sus fundadores, nos habla con ímpetu tal, de que Pereira tiene más edad cronológica de lo que se marca en este calendario, porque sus gentes han hecho más Historia con sus gestas Cívicas perdurables, que muchas más, que las acciones de la modernidad.
Ese Pueblito Viejo de que habla con musical poesía José A. Morales, nos demuestra que RUANA, AZADÓN y MACHETE junto a la sinigual perfección de los versos de Luis Carlos González de cantarle a nuestra patria chica, de que somos aguerridos porta-estandartes campesinos de la paz genuina y trabajadora, que no necesita de galardones mundialistas, para decir que aquí no hay forasteros sotos que todos somos PEREIRA. Y que somos libres para pensar, actuar y vivir la hidalga ciudadanía de un presente, que no teme al hilo corrosivo del desamor y el desapego por el terruño que nos vio nacer.
Ver la brillantez de los hijos de esta ciudad, que no necesita de falsas publicidades ni engañosos empalagos, para mostrar que somos parte de ese número distinguido de pequeñas urbes en continuo desarrollo, sino que también en cada coterráneo por donde corre sangre pereirana, luce con orgullo la intrinseca insignia del RECIO EL1AS, que a punta de pica, pala y recatón abrió el verter en el OTÚN, el sudor, las lágrimas y los esfuerzos de aquellos primeros moradores, que legaron a su descendencia coraje y tesón de titanes comunes y silvestres, que no verían sus nombres enmarcados en cuadros ni placas conmemorativas, sino que su sangre y sus cuerpos se convirtieron en el semillero de nombres, apellidos y familias que construyeron con honor y filial dedicación, esa VENUS surgida del HACHA AL SON.
Somos PEREIRA, la hoy denominada Capital del Eje, que lleva en su corazón la marca de ser LA VILLA DE CAÑARTE, fuerte, deseada MORENA, TRASNOCHADORA Y QUERENDONA ciudad de las puertas abiertas para con sus vecinos, pero celosa vigía de conservar el estilo del MATECAÑA inolvidable, que tiene su nombre renombre propio y nos permite volar a cielo descubierto y pregonar de que aquí somos 154 veces más felices, que cuando se nos dijo: Crece:
...Y SIGUE CRECIENDO BAJO EL INFLUJO DE SU AMOROSA SOLICITUD, de quienes Hoy celebramos algo más que ciento cincuenta y cuatro años.
Escrito por: AMBUO joab56©yahoo.com